Tuesday, April 15, 2008

Mar de Galilea

"La he 'matao'... ahora estás callada, te quiero mucho".
Sin camisa, sonriente y con la mirada perdida, Angelo Caratenutto se paseaba por la plaza del pueblo con un fardo en sus manos. Iba de arriba abajo y de abajo arriba, de la tienda de ultramarinos a la iglesia y de la iglesia al ayuntamiento. Giraba en una de las palmeras y volvía a tomar el camino de regreso. "Es la cabeza de mi madre", le decía a todos los vecinos con los que se cruzaba.
Tras media hora de paseos, subió las escaleras del ayuntamiento, destapó la cabeza de su madre, le dio un beso en la frente y gritó: "La he 'matao'... ahora estás callada, te quiero mucho". Su bar se llamaba Mar de Galilea.
Lo ha contado La Verdad de Murcia.

15 comments:

La independiente said...

Joder, conde, qué historia...
Además, el texto tiene un aire a lo "Santos Inocentes" (milana bonita, milana bonita) que te hace pensar sobre las muchas españas que existen, puestas una encima de otra.

Un abrazo,
X.

Portarosa said...

¡¡Joder!! Qué tristeza.

Anabel Rodríguez said...

A mi estas noticias me dan mucha pena. No creo que tenga nada que ver con los "Santos Inocentes", ni nada por el estilo. Las enfermedades mentales son aterradoras, una crisis de esquizofrenia puede llevar a una persona a este punto. ¡Que pena de hijo! ¡Que pena de madre! ¿Qué sintió esa mujer cuando la vida se le iba? ¿Qué sucederá cuando acabe la crisis de Angelo? ¿Cómo podrá afrontar su vida?. Es terrible.Como en pleno ataque de locura le decía "te quiero"... ¡que tristeza!

Portarosa said...

¿Y ese "ahora estás callada"?
A mí me hace imaginarme una convivencia que el hijo, obviamente enfermo, no soporta por algún motivo.

En fin, qué horror.

Portarosa said...
This comment has been removed by the author.
conde-duque said...

La noticia es tremenda, da escalofríos. Cuando la leí esta mañana temprano me quedé helado... Me imaginé la escena y la escribí corriendo, antes de irme. No sé si pasó exactamente así o no.

Acabo de ver la noticia en televisión. El hijo era esquizofrénico y ya había sido detenido alguna vez por maltratar a la madre, pero ella salió en su defensa y, consciente de la enfermedad, quería ayudarle. Han puesto unas imágenes (creo que del juzgado, hace unos meses o años) en las que sale ella diciendo que qué va a hacer, que es su hijo y está enfermo, que le quiere y le tiene que ayudar... (o eso me ha parecido entender, lo han puesto muy rápido).
En fin, una historia tremenda. El horror de las enfermedades mentales (que a mí tanto me entristecen y afectan al verlas). Y una buena madre.

Como dice mi etiqueta (o "label"), la vida es rara.

Un abrazo a todos.

narrow said...

Pues sí, rara. Yo cuando la he oído me ha parecido volver a oír la historia de vuestra Virgen de la Cabeza de Madrid.
Y ya se sabe, la única Verdad es la de Murcia.
Saludos

Anonymous said...

La historia es tremenda, dramática, horrorosa, pero la actitud de Tele5 anunciando cada poco tiempo durante el telediario que a las tres y media, EN EXCLUSIVA, las imágenes de la decapitación, es lo más espeluznante de toda esta historia. Él es un demente, pero los medios de comunicación, esos que hablan de libertad, son los verdaderos caníbales. Da miedo una sociedad así.

Juan Ballester

conde-duque said...

Hola, Julio, pues tengo que reconocer que no me sé la historia de la Virgen de la Cabeza. Si tienes ganas y no es muy truculenta haznos un resumencillo, anda.

Juan, tienes toda la razón.

Un saludo.

Divina nena said...

La noticia es tremenda, la imagen que uno se compone en su cabeza al oír la noticia en la radio de camino a algún lugar te parte, ese "te quiero mucho" es durísimo.

Pero lo realmente duro es como se pueden lucrar ciertos medios con las desgracias, con las miserias ajenas... no sabía de esto, porque por suerte o por desgracia se del mundo por la red, no tengo oportunidad de ver la tele y la verdad con esto que dices Juan se le quitan a una las ganas.

Y sí, hay muchas Españas desconocidas y muchos problemas sin resolver, porque no olvidemos que estos enfermos no tienen un lugar y sus familias impotentes lo sufren con su día a día, algunos hasta con sus propias vidas, visto el caso.

Mabalot said...

Terrible. Ahí, en qué hacer con un enfermo mental, en cómo tratar a una persona con problemas tan graves (esquizofrenía, creo), ahí es dónde necesitamos a cabezas pensantes, filósofos o lo que sea, para encontrar una solución.

Veo que este blog cambio de formato; ¿¿cómo has hecho?? Queda mucho mejor. La letra más grande, georgia 12, y el ancho de pantalla...
Saludos. Me disculpo por meter baza el otro día en el asunto nocilla con retraso, y en un post que iba de otra cosa mucho más interesante, el collage de Lene (ya lo veo).

Un saludo a todos.

conde-duque said...

Buenas.

Divina, estoy totalmente de acuerdo.

Mabalot, supongo que no es fácil. En los años 60 y 70 se reivindicó mucho la supresión de los manicomios. He leído bastante a Foucault (durante la carrera hice un trabajillo sobre la "Historia de la locura en la época clásica") pero no tengo tan claro que la solución sea acabar con los psiquiátricos, porque después pasa lo que pasa. Supongo que siempre hay que poner límites.
¿La solución? Ni idea.
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Lo otro. Sí, he cambiado el diseño del blog dándole a un botoncito en "Cambiar diseño" (hay varios para elegir). Enseguida me he arrepentido, porque me habían desaparecido todos los links y se había quedado la letra -enanísima- de antes, como podéis ver en los posts de abajo. Pero ya no me dejaba volver al antiguo...
Poco a poco iré retocando el tamaño del texto de los otros posts, cuando tenga tiempo.
Por cierto, si alguien ve que antes tenía su link y ahora no, que me lo diga para volverlo a poner, porque es imposible acordarme de todos.
Muchos los he vuelto a poner fijándome en los tuyos, Mabalot, ya que coinciden la mayoría...

conde-duque said...

Ah, y la letra es Times.

Mabalot said...

A mí me gusta más la georgia, aunque no queda nada mal.
Queda mucho mejor así. Quizá doy el salto yo también.

conde-duque said...

Si cambias ten cuidado con los links.
Probaré la Georgia, a ver qué tal...