Sunday, March 11, 2007

11-M

Todo el día buscando una palabra, una sola palabra, pero nada, no sale nada. Ni una gota; estás seco. Sólo un nudo de angustia en la garganta, dolor -imaginado- por la ausencia.
Lo más indigno de ser hombre: la mentira hecha tiempo, la traición de las horas, día a día... Tres años de vacío en el recuerdo.
Y, mientras tanto, todos gritan. ¡Qué pena que no sea eterno el minuto de silencio!

1 comment:

desconvencida said...

Debería haber sido un silencio de todos, pero últimamente nuestros políticos están cogiendole el gusto a pelearse bochornosamente...