Un matrimonio en horas bajas (Ingrid Bergman y George Sanders) viaja de Inglaterra a la región de Nápoles para vender una casa que forma parte de la herencia del marido. Él es un inglés algo petulante y estirado, que vive enfrascado en su trabajo, y ella una mujer bellísima y sentimental, con especial sensibilidad para el arte, que está a punto de cumplir los 40 y atraviesa una etapa de "replanteamiento existencial", o como se diga.
Desde la primera escena -impresionante, maravillosa (no tengo adjetivos...)- percibimos nítidamente la distancia que separa a la pareja: van en coche por la carretera, vamos viendo el paisaje, escuchamos su conversación y analizamos sus gestos. Es como si estuviésemos ahí con ellos. Es real...
Las ruinas de Pompeya, con el Vesubio al fondo, son una metáfora elocuente de la crisis que está atravesando la pareja.
En España se tituló Te querré siempre. Se rodó en 1953 -por entonces Ingrid Bergman estaba casada con el director Roberto Rossellini- y para mí es la mejor película de la mejor época de la mejor actriz de todos los tiempos. Ni más ni menos... (Hala, ya está, me he quedado tan a gusto diciéndolo.)
3 comments:
Pues no la he visto pero me la apunto... quedan sólo 28 días para mi viaje a Italia, empezó ya la cuenta atrás, qué ganas!!
A mi me gusta mucho la película...e Italia mucho más!
Conviene verla antes de ir a Nápoles, porque después reconoces algunas calles, el Museo Arqueológico Nacional, etc. Pompeya y toda esa zona es preciosa... ¡Viva Italia!
Post a Comment